Dos excepcionales casas de alta gama de 400 m² en la urbanización más exclusiva de Punta Blanca. El diseño arquitectónico sin igual se suma a la comodidad de los espacios abiertos integrados en un entorno maravilloso de naturaleza y seguridad. Vivir junto al mar en una residencia Boonker, garantiza la seguridad sísmica y la resistencia a los exigentes factores climáticos de estas zonas. Lujo, modernismo, eficiencia y seguridad resumen estas construcciones.